Tras el excelente recibimiento de su anterior montaje Stockmann, Les Antonietes proponen un acercamiento a Tío Vània. Entre odios, amores, celos y frustraciones, seis personajes se debaten por comprender cuál es su papel en esta vida, además de beber vodka y calentar el samovar.

“A menudo se me critica que sólo escribo sobre hechos mediocres, y que no represente héroes positivos. Llevamos un vida provinciana, nuestras ciudades empobrecen y nuestro pueblo está exhausto. Todos, mientras somos jóvenes, cantamos como gorriones sobre montones de estiércol; a los cuarenta años ya somos viejos y empezamos a pensar en la muerte. ¿Qué especie de héroes somos? Sólo quiero contar a la gente, con total honradez: mirad qué aburrida y apagada es vuestra vida. Que la gente lo entienda, eso es lo que más importa; si lo hacen, seguramente inventaran una vida diferente y mejor. El hombre mejorará cuando lo haya entendido.” (Anton P. Txékhov)